Ya no tiemblan los ojos cerrados, en la oscuridad de la noche.
Mírame
La luna miraba sola pariendo el mar sus olas primeras.
Escuché
Duele.
Ya no se mueve la luz de esquina a esquina temblorosa y aturdida.
Sonrie
Ni baila sola con la marea del sueño que lagrimea nostalgia.
Canta.
Ya no tiene la tarde de niebla el sol, cayendo entre mis ojos quietos.
Ve
Ni la luciérnaga llora haciendo el amor, entre las rosas frías,
Duerme.
Despierta.
La belleza era la misma noche, abriendo la aurora con el corazón de las estrellas.
Brilla
Después,veo el verso que vuela libre,sobre el pecho de la paloma, aguardando el color de un lirio.
Paz
La dulce luz que parpadea entre el rocío de unas letras felices.
Aroma.
El sueño abre los ojos y despierta en la cálida sonrisa del alma viva.
Respira
El resplandor en los párpados de seda, de esta noche nueva
Sueña.
Después.
Ama ahora.
©® Isabel Pimentel.